El trato de pacientes con autismo supone un importante reto tanto para los dentistas como para los padres.
La mayoría de tratamientos odontológicos envuelven el uso de luces, sonidos y tacto de una parte muy sensible del cuerpo. Y si la mayoría de personas ya se encuentra intranquila y es aprensiva al tratamiento dental, solo pueden imaginarse lo que esto supone para un paciente con TEA, sea niño o adulto.
Se sabe que las personas dentro del espectro autista suelen tener desórdenes en la integración sensorial. Esto hace que le tratamiento dental sea todavía más difícil. Además, los cambios de rutina generan ansiedad al igual que los nuevos ruidos, la gente nueva o las actividades desconocidas. En el pasado, estos retos hacían que la mayoría de dentistas no quisieran tratar este tipo de pacientes pero esto afortunadamente no sucede actualmente. Al contrario, muchos dentistas (Barcelona) han recibido la educación necesaria para aprender a tratar correctamente a sus pacientes con TEA.
Problemas dentales en pacientes con autismo
Higiene dental pobre: Aunque no se trate de un problema único de las personas dentro del espectro autista, este tipo de pacientes sufre mayores dificultades para mantener una boca sana.
Mayor riesgo de caries dental: Las dificultades para mantener una higiene dental correcta suponen un mayor riesgo de padecer caries dental.
Tendencia a sufrir bruxismo: Muchas personas sufren bruxismo, pero es mucho más frecuente dentro del TEA.
Autolesiones: Muchos pacientes con autismo se muerden los labios u otras partes de la boca de manera instintiva. Esto se puede tratar mediante un protector dental en algunos casos.
Problemas relacionados con la medicación: Algunos pacientes sufren convulsiones y se medican para controlarlas. Este tipo de medicamentos puede comportar una mayor sequedad en la boca, que incrementa el riesgo de padecer caries dental.
Técnicas para tratar a los pacientes con autismo
Preparar una pre-visita para mostrarle e introducirle a la clínica Los padres deberían hablar con el dentista antes de la visita para explicarle cosas del paciente, incluyendo qué comportamientos suele tener y con qué se puede lograr que se calme y se siente bien. Es importante dejar que el paciente visite la clínica dental para que se familiarice con el entorno y los trabajadores de allí. Dejarle ver las bandejas con el material que se utiliza o incluso dejarle tocar aquello que es seguro que toque, puede ayudarle a sentirse más seguro cuando en el momento de la verdad se tenga que someter a tratamiento. Del mismo modo, es importante que conozca a todas las personas del equipo con las que va a tratar más adelante, esto le hará sentir más cómodo y tranquilo. Más de 800 genes han sido asociados con el autismo hasta la fecha.
Hacer que la primera visita:
Que esta visita de tratamiento sea tan corta como sea posible, además de poco invasiva, esto le reconfortará.
Mantener la comunicación todo el rato El dentista y el higienista deben explicarle al paciente qué es lo que van a hacer en cada momento, qué instrumentos van a utilizar en el procedimiento, cómo le van a hacer sentir y cuánto tiempo durará hasta que termine. El paciente debe sentirse capaz de preguntar cualquier cosa y saber que si hace un signo concreto el dentista entenderá que debe pararse un momento ya que no puede seguir.
Que los padres lo acompañen si lo necesita Esto depende de lo que decidan los padres con el dentista. Algunos están más tranquilos con ellos en la habitación, mientras que para otras es más bien perjudicial. Se trata de una decisión que se debe tomar caso por caso. Si como padre crees que lo mejor para tu hijo es que tú estés allí, háblalo con el dentista y seguro que lo entenderá.
Posible uso de anestesia general o sedación consciente . Los tratamientos dentales más invasivos como las extracciones dentales, los rellenos dentales o incluso las radiografías pueden hacerse bajo sedación o anestesia general si el comportamiento del paciente así lo requiere.
Conclusiones para pacientes con TEA en la clínica dental
Los pacientes con autismo presentan una serie de retos en su día a día que deben ser solventados por parte de las personas que están a su alrededor. Sus padres y tutores deben ayudar a los dentistas para que juntos pueden hacer que el paciente esté en las mejores condiciones posibles para recibir un tratamiento dental necesario sin comprometer su estado físico y psicológico. Con una planificación dental adecuada es posible mantener la salud de los dientes y las encías de los pacientes con autismo durante toda la vida.
Extraído y levemente modificado de:
Dr. Dario Vieira (2014) Consejos para el tratamiento odontológico de personas autistas. Propdental.
Foto: found_drama Flickr via Compfight cc