Hablar con mi hija de esas cosas:
1) Empiece pronto. Hable con su hija antes de que sean visibles los signos de la pubertad.
2) Enseñe cómo llamar las partes del cuerpo. Use las palabras apropiadas para las partes del cuerpo (p. ej., vagina, senos) y las funciones del cuerpo (p. ej., orinar, periodo). Esto evita confusiones y le da a su hija el vocabulario que usará luego cuando aprenda sobre la pubertad, el aseo personal y la reproducción.
3) Use materiales de apoyo. Usted sabe cómo aprende mejor su hija. Enséñele sobre la pubertad de la misma manera que le enseña sobre otras cosas. Por ejemplo, si su hija aprende mejor repitiendo algo muchas veces, divida la información en datos sencillos y practique muchas veces. Si aprende mejor con dibujos, pruebe a usar apoyos visuales o historias sociales. Estos apoyos le ayudarán a que entienda las cosas difíciles de una manera más clara.
4) Pregunte a un profesional. Hable con los doctores, maestros o terapeutas de su hija para que le den otras ideas.
Establecer Rutinas saludables
- Ayudar a su hija a mantenerse activa
Es importante que la niña aprenda a estar sana desde que es pequeña. Los cambios en las hormonas y algunas medicinas pueden causar que suba de peso durante la pubertad. Hacer ejercicio regularmente y comer bien puede ayudar a su hija a que no aumente de peso, tenga mejor humor y más confianza en sí misma. Comenzar pronto estos hábitos saludables es la mejor manera de ayudar a su hija a convertirse en una adulta activa.
Programe actividades físicas. Cada día, su hija debe tener tiempo para jugar de forma activa, como ir a caminar, jugar afuera o andar en bicicleta. Si le es difícil empezar, dele varias opciones para escoger o ¡vaya con ella! Incluya siempre actividades físicas divertidas en la rutina diaria de su familia.
Recompense el ejercicio. A medida que su hija se hace mayor, cambie de “tiempo para jugar” a tiempo de hacer ejercicio, deportes o actividades familiares (como pasear juntos). Si su hija no quiere ejercitarse, puede animarla dándole un premio o recompensa después. A esta edad, es mejor no dar comida como recompensa. Pruebe “Primero ejercicio”, seguido de algo preferido, como “Después videojuegos”.
- Fomentar el aseo personal
La buena higiene puede mejorar la independencia y la confianza de su hija. Además, si tiene buenos hábitos de aseo personal, usted pasará menos tiempo realizando estas tareas de aseo por ella.
Algunos tips
- Haga un tablero de imagenes o libro de dibujos. Incluya dibujos de las cosas que necesita (p. ej., jabón líquido, desodorante, toallas femeninas) y una agenda visual con los pasos necesarios.
- Prepare estuches de aseo. Puede preparar estuches para las distintas tareas. Se pueden usar cajas de zapatos viejas, recipientes de plástico transparente. etc Estos son ejemplos : estuche de baño: Jabón líquido, champú, acondicionador, jabón para la cara, afeitadora, crema de rasurar.Cepillarse los dientes: Cepillo de dientes, pasta dental, hilo dental, enjuague bucal. Menstruación: Distintas toallas femeninas, toallitas húmedas, , ropa interior para cambiarse. Rutina de la mañana: Crema corporal, desodorante, toallitas húmedas, crema para la cara, cepillo de pelo.
- Durante la pubertad se empieza a sudar más, así que es importante enseñar a las niñas a controlar el olor usando desodorante, cambiarse de ropa a diario, lavar la ropa sucia una vez a la semana y mantenerse aseadas.
- No olvide los apoyos visuales. Use listas e historias para recordarle a su hija los pasos que necesita seguir para asearse y por qué. Puede usar una agenda o guía que muestre qué acción o paso viene después. Incluya los pasos de lavarse el cabello con champú y enjuagarse, y las partes del cuerpo que tiene que lavarse con jabón. Plastifique la guía y cuélguela en la ducha.
- Obstáculos. Si aplicarse desodorante es algo difícil para su hija, pruebe distintos tipos, como el desodorante de bola o en rociador. Si le cuesta trabajo bañarse sola debido a las dificultades de movimiento, pruebe con sillas de baño, una regadera de mano, manoplas para lavarse o cepillos de mango largo y fáciles de agarrar, etc.
- Huele demasiado fuerte. Anime a su hija para que escoja sus productos de aseo, sobre todo los perfumados. Hay niñas a quienes les molestan los olores fuertes y prefieren los productos sin olor. Muchos productos que dicen en la etiqueta “para piel sensible” no tienen olor.
3) Acné
Algunas adolescentes sufren de acné (granitos) debido al aumento de la grasa de la piel, los cambios en las hormonas, la higiene y hasta la genética. Pregunte al médico de su hija sobre los productos para el acné. Tome una foto de la cara de su hija o use un dibujo y marque con círculos las áreas donde se debe aplicar el producto a diario. Enseñe a su hija que hay que evitar las zonas sensibles como los ojos, los agujeros de la nariz y la boca.
4) Depilación
Durante la pubertad, empieza a crecer y a cambiar el vello en el cuerpo. Use un dibujo del cuerpo de una mujer para enseñar a su hija dónde crece el vello y para prepararla para los cambios que verá en su cuerpo. Algunos adultos y adolescentes quieren rasurarse o depilarse el vello del cuerpo. Demuestre cómo afeitarse o depilarse. Permita que su hija la vea a usted o a una hermana mayor mientras se rasura o depila, y escriba los pasos. Haga que su hija practique con usted, paso por paso. Escriba o tome fotografías de cada paso para hacer una guía o agenda visual. Para ayudarla a recordar dónde no tiene que rasurarse, use una foto o dibujo de una persona y coloree o numere las áreas que hay que rasurar. • Anote las fechas en que se debe afeitar. Si su hija puede rasurarse (o si lo hace con ayuda), use un calendario con dibujos o marcas como recordatorio de cada cuando tiene que rasurarse y cuándo tiene que cambiar la afeitadora. • Limite la espuma de rasurar. Si su hija necesita ayuda con el control de cantidades o manejando el frasco de espuma, trate de usar los frasquitos de espuma para viajes o una brocha de afeitar. • Busque la rasuradora correcta. Las niñas que tienen problemas con las manos pueden preferir una rasuradora eléctrica, en lugar de las afeitadoras tradicionales. Si prefiere la afeitadora tradicional, pregunte a su terapeuta ocupacional si las afeitadoras con contrapeso o un manguito universal pueden ayudarle a sujetarlas.
5) Lavarse los dientes y el aliento • Haga una agenda visual. Use dibujos que muestren los pasos de cepillarse los dientes. Escoja el cepillo de dientes correcto. Un cepillo que vibre o tenga contrapeso puede ayudar a los niños que tengan dificultad para agarrar el cepillo de dientes y cepillarse. Busque un cepillo de cerdas suaves.Demuestre cuándo y cuánto tiempo. Acostumbre a su hija a cepillarse a diario, incluyendo recordatorios en un calendario. Las alarmas también pueden recordarle por cuánto tiempo tiene que cepillarse. ¡Los dentistas recomiendan dos minutos!!
Comportamiento apropiado e inapropiado en público ¿Hace o dice su hija cosas en público que usted preferiría que no hiciera?
Su hija necesita aprender lo que está bien hacer en público y lo que está bien hacer en privado. Los comportamientos privados incluyen, por ejemplo, ir al baño, expulsar gases, tocarse las partes íntimas por cualquier motivo y cambiarse de ropa. Saber comportarse apropiadamente en la sociedad puede ayudar a su hija a encajar con sus compañeros y que haya menos posibilidades de que la acosen o maltraten. Los niños que entienden la diferencia entre los comportamientos que están bien o están mal en público pueden tener menos problemas en la escuela o con la policía cuando se hacen mayores.
Enseñar estas habilidades a su hija
- Comience pronto. Hable sobre los comportamientos públicos y privados en familia y ponga reglas como, por ejemplo: “Solo puedes estar desnuda en el baño o en tu recámara con la puerta cerrada” o “Nos ponemos la ropa o la pijama antes de salir del baño o de la recámara”. Recuerde las reglas a su hija usando palabras o dibujos sencillos. ¡Tenga las mismas reglas para todos en la familia!
- Use apoyos visuales. Haga una lista de lugares que son públicos y lugares que son privados.
- Use historias. Las historias ayudan a su hija a entender estas reglas y por qué las tenemos. Piense en los comportamientos que son un problema para su hija y escriba una historia que explique claramente cuándo y dónde está bien hacer eso.
- Dirija. Diga a su hija dónde puede hacer esas cosas privadas usando palabras o dibujos sencillos. Por ejemplo, diga algo como: “Puedes hacer eso en tu (recámara, baño)” o muéstrele una tarjeta visual que diga “En privado”. Diríjala a un lugar privado cuando se toque sus partes íntimas o cuando se ajuste la ropa interior. • Cuando lo privado no puede ser privado. Algunos niños necesitarán ayuda con tareas que se hacen en privado, como vestirse, bañarse o hacer sus necesidades. Enseñe a su hija a quién puede pedir ayuda para estos actos privados cuando está en lugares públicos, como la escuela o en un restaurante. Esto incluye enseñarle a planear, pedir ayuda discretamente o usar gestos o tarjetas. Tocarse las partes íntimas Todos los niños, en algún momento, descubren sus partes íntimas. Cada familia tiene sus propios valores y creencias sobre este comportamiento, y está bien que usted le enseñe a su hija lo que su familia cree. El tocarse a veces es una parte normal del desarrollo de los niños y las niñas, por lo que es casi imposible impedir este comportamiento por completo. Enseñar a su hija cuándo y dónde está permitido hacer eso puede ser una mejor opción. Castigar, avergonzar o llamar mucho la atención puede hacer que el comportamiento ocurra todavía más; o tambien, puede hacer que la niña ya no quiera preguntarle cosas importantes a usted o al doctor. Es importante conocer los hechos. Tocarse las partes íntimas no va a causar ceguera, ni uno se “vuelve loco”, ni se deja de crecer o se lastima las partes íntimas. No siempre está asociado a pensar en el sexo. Algunos jovencitos se tocan porque es una sensación que los calma. Algunas niñas pueden tocarse las partes íntimas porque sienten picor o dolor, lo cual podría ser señal de una infección. Si su hija se toca tanto que le impide hacer otras actividades, si nota la piel irritada o tiene otras inquietudes, hable con el doctor.
Para enseñar a la niña cuáles son las “partes íntimas” se puede decir que son las que se cubren con el traje de baño o la ropa interior. Puede encontrar ejemplos de apoyos visuales e historias sociales para hablar de las partes íntimas.
Si su hija se toca las partes íntimas en público, usted quiere que deje de hacerlo rápida y silenciosamente. Puede usar un apoyo visual para recordarle esta regla, como “No tocarse” o una imagen para que haga otra cosa que no puede hacer al mismo tiempo, como “Manos sobre la mesa”. Para interrumpir el comportamiento, use un Tablero Primero-Después con las imágenes de “Lavarse las manos” y luego “Premio”. Antes de salir, considere traer actividades para que tenga las manos ocupadas, como un jueguito o videojuego de mano. Si está en casa, puede usar un apoyo visual para que escoja “No tocarse” o ir a un sitio “En privado
Menstruación
A medida de que su hija se acerca a la pubertad, su cuerpo empieza a cambiar. Le comenzarán a crecer los senos y luego, en uno o dos años, empezará la menstruación. Estos cambios son normales en la pubertad. Sin embargo, si su hija no entiende lo que está pasando, puede sentir miedo. Puede usar historias y dibujos para ayudarla a entender cómo cambia su cuerpo para prepararla.
Ayudar a su hija a prepararse para el periodo
- Comience pronto. Las niñas llegan a la pubertad a distintas edades (normalmente entre los 9 y15 años), y las niñas con discapacidades pueden empezar incluso antes. El periodo comienza, por lo general, uno o dos años después de que empiezan a crecer los senos. El momento apropiado para hablar de la menstruación es antes de que su hija tenga el primer periodo.
- Hable sobre esto. Aunque pueda ser incómodo, usted debe hablar directamente sobre la menstruación con su hija. Hablarle de manera clara y directa puede ayudarle a entender que tener el periodo es algo normal y esto le quitará el miedo. No olvide decirle que la sangre no significa que ella se ha lastimado.
- Sea abierta. Para animar a su hija a que le hable a usted, diga cosas positivas como “Es una buena pregunta”. Manténgase calmada y trate de que no se vea que le da pena o vergüenza. Con esto su hija se sentirá bien al hablar con usted y podrá enseñarle la verdad sobre el periodo.
- Aproveche las oportunidades diarias. Cuando compre tampones o toallas femeninas, o vea comerciales en la televisión, use estos momentos para comenzar una conversación con su hija sobre la menstruación.
- Use los términos correctos. Conteste a las preguntas con un lenguaje sencillo y términos correctos (como senos, vagina, toallas femeninas y tampones).
- Considere cómo aprende ella. Enseñe a su hija sobre la menstruación de la forma que mejor aprenda ella. Por ejemplo, si ella aprende mejor con apoyos visuales, trate de usar dibujos o videos en vez de historias o listas. • Pregunte a un profesional. Pida ayuda al doctor de su hija para enseñarle sobre la pubertad y los cambios de su cuerpo
Enseñar a mi hija sobre el periodo- Debe explicar a su hija que verá lo que parece sangre en su calzón o en el inodoro. Para prepararla para lo que pueda encontrar cuando empiece su periodo, puede marcar la ropa interior con colorante para alimentos o marcadores. Asegúrese de que entienda que esta sangre no significa que se ha lastimado
- Explique que algunas mujeres se sienten diferentes cuando tienen el periodo. Pueden encontrarse cansadas o estar de mal humor. Pueden tener hinchazón o les puede doler el vientre. Dé a su hija una manera de decirle cómo se siente. Use una demostración, tarjetas con dibujos, un tablero de comunicación o una escala numérica o con dibujos para que ella le explique cómo se siente
- Enséñele que los periodos son algo privado. Explique que ella puede hablar de su periodo con sus padres, su doctor o la enfermera de la escuela. No debe hablar de su periodo con niños, amigos casuales o desconocidos.
- Enseñar a mi hija sobre el aseo personal • Primero pruebe las toallas femeninas. Le recomendamos que empiece con toallas y cambie luego a tampones, si fuera necesario. Su hija puede tener dificultad con los tampones si tiene dificultad con los movimientos. También es más difícil saber cuándo hay que cambiar de tampón. Si el flujo es tan fuerte que las toallas femeninas no son efectivas, hable con el doctor para ver otras opciones.
- • Deje que elija. Compre diferentes tamaños y tipos de toallas femeninas antes de que comience la menstruación. Antes y después de ir de compras, hablen de aspectos como el grosor y si tienen alas. Deje que su hija escoja la que le resulte más cómoda. Después de decidir el tipo que más le gusta, lleve a su hija de compras y use una tarjetita con la caja de las toallas temeninas para ayudarla a que las encuentre ella sola en la tienda y que las ponga en el carrito para comprarlas,
Otras herramientas
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Modificado y Adaptado del kit de herramientas de Healthy Bodies (Vanderbilt Kennedy Center) Esta publicación fue desarrollada y escrita por Vanderbilt Leadership Education in Neurodevelopmental Disabilities (LEND). El kit original tiene guiones gráficos y elementos visuales que puede utilizar para implementar los métodos descritos en el kit de herramientas. Este archivo no está incluido en el manual impreso. Puede optar por imprimir todo el apéndice, o puede imprimir una página en particular o un conjunto de imágenes para laminar para el uso diario. Puede compartir estas imágenes con otras personas que trabajan con su hijo o lo cuidan. Los kits de herramientas de Healthy Bodies están disponibles en español. Puede acceder al kit de Herramientas en https://vkc.vumc.org/healthybodies/
Autor pictogramas: Sergio Palao. Origen: ARASAAC (http://www.arasaac.org). Licencia: CC (BY-NC-SA). Propiedad: Gobierno de Aragón (España)