A muchos padres de niños con autismo nos dijeron que si nuestros hijos no hablaban a los 4 o 5 años, era muy probable que nunca lo fueran a hacer. Sin embargo, los estudios sugieren algo distinto.

Este estudio fue realizado en 535 niños, de entre 8 y 17 años con TEA, quienes a los 4 años aun no habían adquirido lenguaje, con el objetivo de examinar la prevalencia y los predicotores de la adquisición del lenguaje en esta población.

Se encontró que la mayoría (70%) de los participantes a la edad de 8 años adquirió lenguaje, y casi la mitad un habla fluida. Como tal, puede esperarse que muchos niños con TEA que a los 4 años  presentan con retraso severo del lenguaje (es decir, tener solo pocas palabras sueltas como máximo) desarrollen lenguaje.

Los resultados de este estudio apoyan la importancia de la  inteligencia no verbal y el  compromiso social como predictores primarios del desarrollo del lenguaje en niños con autismo. Estas habilidades centrales parecerían tener mayor influencia en el desarrollo de la comunicación que  otras características asociadas, como los comportamientos repetitivos o estereotipados, o las alteraciones en la integración sensorial. Por lo tanto,  los autores sugieren el uso de estrategias de intervención que se centren en el desarrollo de las redes sociales y estrategias de cognición como la teoría de la mente o la toma de perspectiva. Sin embargo, se necesita más investigación sobre el impacto de estas intervenciones en el desarrollo del lenguaje. Las expectativas de tratamiento deberían ajustarse al niño, siempre esperando avances,  pero considerando que quienes tienen una inteligencia no verbal significativamente más baja que la típica y/o mayor compromiso social, lo harán a un ritmo más lento. El coeficiente intelectual no verbal resultó ser el predictor más fuerte para adquirir un nivel de lenguaje que permitiera armar frases y el deterioro social tuvo similar impacto para predecir la adquisición de habla fluida.  Por lo tanto, el foco de los tratamientos también podrá ajustarse al desarrollo del progreso del lenguaje.

Conclusiones

De acuerdo con informes anteriores, muchos niños con autismo y retraso severo del lenguaje  logran armar frases y/o un habla fluida. La inteligencia no verbal fue el mejor predictor de la adquisición de frases, mientras que el interés y compromiso social, tuvo igual o mayor peso al predecir la edad de adquisición y  el logro de  habla fluida. Otras características relacionadas con los trastornos de espectro autista tales como los comportamientos repetitivos o las  particularidades sensoriales no pudieron predecir el nivel de lenguaje adquirido. Esto enfatiza la superposición entre la socialización y la comunicación en esta población. Tras un examen más detallado, niños con inteligencia no verbal dentro de 1 SD de la media (es decir, IQ $ 85) adquirieron lenguaje casi 6 meses antes que aquellos con inteligencia no verbal debajo de la marca 1-SD o con discapacidad intelectual.

Este estudio destaca que muchos niños con retraso severo del lenguaje alcanzaron el habla fluida, o al menos la capacidad para armar frases, aún después de los 4 años. Estos datos también implican la importancia de evaluar y considerar las habilidades no verbales, tanto cognitivas como sociales, al desarrollar intervenciones y establecer objetivos para el desarrollo del lenguaje.

Modificado de: 

Predictors of Phrase and Fluent Speech in Children With Autism and Severe Language Delay.

Wodka, et al. Pediatrics peds.2012-2221

http://pediatrics.aappublications.org/content/early/2013/02/26/peds.2012-2221